Robert Drost

Robert Drost es el jefe de I+D de Consensys Mesh. Cuando tenía 12 años, empecé mi relación con los ordenadores en una Commodore 64 y aprendí por mi cuenta a programar en lenguaje de máquina, ensamblador e incluso C. Mi interés constante por saber por qué funcionan las cosas y cómo mejorarlas de forma natural me llevó a dedicarme a la informática y la ingeniería. Con más de 150 patentes y docenas de publicaciones, me apasiona encontrar excelentes soluciones a problemas interesantes. Pasé los primeros años de mi carrera en las divisiones de productos e investigación de Sun Microsystem y, al mismo tiempo, me doctoré en EE y CS en Stanford. Más tarde, tras un breve período en Oracle, decidí que había llegado el momento de crear una empresa emergente. Tras haber visto de primera mano los desafíos de las redes IP convencionales basadas en hardware, cofundé una empresa emergente definida por software para llevar las redes al siglo XXI. Además de desarrollar una tecnología excelente, ser emprendedor, hacer crecer un negocio de la nada y gestionar una empresa de pérdidas y ganancias ha sido mi verdadero MBA. Gracias a mi empresa emergente, he perfeccionado mis habilidades para crear equipos de primer nivel en tecnología, ventas y marketing, y he recaudado más de 100 millones de dólares de capital de riesgo. En cierto sentido, mi curiosidad anterior solo por la tecnología ha crecido hasta incluir el aspecto organizativo humano y empresarial de la creación de equipos excelentes, relaciones con socios y clientes y ecosistemas que sean más que la suma de las partes. Disfruto de un entorno equilibrado, en el que el trabajo individual y un entorno de equipo estrecho y colaborativo conducen a éxitos compartidos sobre los que comunicamos y educamos al mundo. Siempre estoy aprendiendo cosas nuevas porque he descubierto que el cambio es una constante en la tecnología. Como resultado, aporto mis amplios y profundos conocimientos a nuevas áreas con una perspectiva nueva y mi comprensión de los paradigmas de aplicaciones y datos, los protocolos y los niveles de API, los patrones de los lenguajes de programación, los sistemas operativos, los controladores, el firmware, el sistema e incluso los chips y transistores. Como siempre, ¡es un buen momento para dedicarse a la tecnología!